¡Hola a todos!
Continuando con la serie de artículos sobre otros materiales de juego, hoy vamos a probar las carpetas Pro-Folio, en sus versiones de 4 y 9 bolsillos y LX. La mayoría usamos este tipo de carpetas para transportar nuestro cambio, así que tenemos que buscar carpetas resistentes, ya que no van a pasar la mayor parte del tiempo tranquilamente en la estantería, estarán dando tumbos dentro de la mochila.
Cada una de estas carpetas podemos encontrarlas en 5 colores: negro, blanco, rojo, verde y azul, los cinco colores de Magic y la misma gama que ya hemos visto en sus cajas y fundas.
Empezamos por la más pequeña:
BCW 4-Pocket Pro-Folio
Carpeta de plástico con 20 páginas de 4 bolsillos en cada lado, así que admite 160 cartas comodamente, incluso enfundadas. Cada uno de los bolsillos puede tener más capacidad, pero yo no recomendaría meter más de dos cartas en cada bolsillo, ya que se dan de sí y cuando queramos meter menos cartas bailarán dentro.
Las páginas son rugosas, para evitar que resbalen las cartas, y negras (en lugar de transparentes como las de Ultra Pro), lo cual hace que estéticamente las cartas queden mejor presentadas. Las uniones entre las hojas y del bolsillo transparente con la hoja no están cosidas pero tampoco se aprecian restos de pegamento, así que probablemente se unan con algún proceso térmico en la fabricación.
Las cubiertas son flexibles pero llevan un refuerzo en el interior de la parte delantera y trasera para evitar que se doblen con facilidad. En la parte trasera queda perfecto, pero en la carpeta que hemos recibido para este análisis, la parte delantera queda un poco abombada, como si no se hubiesen unido las partes bien y quedase aire entre las dos piezas (como cuando usabas más forro del necesario para un libro). En la foto no se aprecia muy bien, pero si os fijáis en las zonas marcadas se nota que el reflejo de la luz no es como correspondería si fuese totalmente liso.
Son bastante resistentes, pero no dejan de ser de plástico, así que pueden llegar a doblarse si se trata sin cuidado (dejándolo caer de esquina estando abierto, por ejemplo) y se quedaría marcado.
Las cartas se introducen de manera lateral, desde el centro de cada hoja, impidiendo que se salgan por la parte de arriba si colocamos el album boca-abajo o lo cojemos al revés (que no se a vosotros, pero a mi esto me ha pasado más de una vez...) y caben perfectamente, incluso con doble funda, pero sin quedar demasiado holgadas.
Pero personalmente, el detalle que más me gusta es la goma para cerrarlas. Algo muy sencillo pero que se ha empezado a ver hace relativamente poco tiempo y proporciona un nivel de seguridad adicional. Mantener la carpeta cerrada y sin posiblidad de abrirse por mucho traqueteo que haya en nuestra mochila es algo que minimiza mucho el reisgo que corren nuestras cartas.
BCW 9-Pocket Pro-Folio
Podríamos considerarlo el hermano mayor del anterior.
En este album encontramos las mismas 20 páginas dobles pero con 9 bolsillos en cada una, pudiendo guardar 360 en él. El grosor el mismo, pero al ser más grande da la sensación de estar mejor proporcionado. También influye en esto que no presenta el abombamiento del que hablabamos en la parte frontal, dejando una sensación mucho mejor al tacto. Sigue siendo de plástico, pero ese pequeño detalle hace que parezca mucho mejor rematado.
La goma es un poquito más floja que en la otra carpeta, pero sigue quedando suficientemente ajustada como para que no se abra por accidente.
BCW 9-Pocket Pro-Folio LX
Si el anterior era el hermano mayor, éste es el Primo de Zumosol de la familia.
Nada de plástico en este caso (excepto en las hojas, claro): las cubiertas (dobles) son de piel sintética, con el mismo acabado que las cajas, y ligeramente acolchadas en la pieza exterior; las costuras, de hilo rojo y negro en nuestra carpeta.
Las hojas son iguales que en las otras dos carpetas, lo que desluce un poco el conjunto. Con un exterior tan bueno destacan mucho más las irregularidades en las uniones de los bolsillos con las hojas.
El principal inconveniente que le veo a éste es que las cubiertas son prácticamente del mismo tamaño que las hojas, mientras que en los anteriores sobresalen medio centímetro. Esto hace que las hojas queden al ras y puedan dañarse dentro de una mochila con muchos objetos rodando (pero la parte exterior de la hoja, no las cartas).
¡Y esto es todo por hoy! Pronto volveremos con más análisis.
